El desarrollo de la eugenesia en la Alemania Nazi
Por Joel Cruz Cotero
“Yo enseño al superhombre. El hombre es un ser que debe superarse”
Friedrich Nietzsche
Durante el imperialismo europeo se empezó a desarrollar la idea de la superioridad de la raza. Se le dio mucha importancia a la genética para solucionar problemas sociales los cuales la eugenesia[1] ofrecía soluciones biológicas. Algunos eugenesistas creían que la única manera de mejorar a la sociedad era mediante el perfeccionamiento de la especie humana. El “darwinismo social” y el “superhombre”[2] como ser superior eran términos que los imperialistas, europeos en su mayoría, creían como verdad. Esta forma de pensar no cambio mucho durante la Primera Guerra Mundial, tanto ingleses, francés y alemanes se creían los responsables de brindar el progreso a los habitantes de sus colonias, por supuesto, inferiores para ellos. Ya después, en el periodo entre guerras la idea de una raza perfecta se desarrollo principalmente en Alemania, sobre todo una vez que Hitler había adquirido el poder absoluto. Con esto llegó a mi tesis, la creencia de la necesidad de una raza superior fue una de las políticas fundamentales de la Alemania nazi de Hitler, además por diversas causas esta política pudo tener una amplia aplicación. “La utopía de Hitler se basaba en tres conceptos clave arraigados en las mentalidades alemanas: el Reich, el Raum y la Rasse”[3].
En la época hitleriana, los nazis consideraban como su responsabilidad empezar el “resurgimiento étnico”. Era necesario corregir los errores cometidos durante la era de Weimar, se tenían que cambiar tres modas: el control de natalidad (dos hijos por familia), la libertad sexual y la inmigración de los judíos del Este. Existía el miedo de la “mezcla racial” entre los “aptos” (germanos) y los “no aptos” (razas inferiores según los alemanes como los judíos y gitanos), además los nazis tenían el temor de que “los aptos” fueran cada vez menos, debido al control de natalidad y la libertad sexual, mientras los “no aptos” se reprodujeran exponencialmente.
Para incrementar la población de la “raza aria” era fundamental crear incentivos para aumentar la natalidad de los “superiores”, mejorar la atención médica, y habría una supervisión más estricta en los nacimientos y abortos. Ahora, para disminuir la población de las “razas inferiores” (especialmente los judíos y los gitanos) y población defectuosa, se realizaron diversas actividades como la aplicación de la eutanasia a enfermos e “inválidos”, esterilización involuntaria (era preferible a la existencia de gente con enfermedades hereditarias capaces de reproducirse), racionamiento de la atención médica y el exterminio de las “razas inferiores”, esto se pudo observar en los genocidios ocurridos en los campos de concentración, por ejemplo ya para 1944 en el campo ubicado en Auschwitz ya habían muerto 500,000 personas.
Continuando el trabajo, es importante mencionar como Hitler y los nazis pudieron cometer semejantes atrocidades. Hitler por principio de cuentas tenía una alta popularidad en el tercer Reich, la mayoría de los alemanes lo apoyaba, esto debido a la capacidad de mantener tranquilos a los alemanes y por los resultados que había logrado, o simplemente le temía demasiado y no se oponían, en realidad hubo poca resistencia y esta fue severamente reprimida. Entre 1933 y 1938 hubo actividad de vigilancia por parte de las SA y los detectives de la SS, 562,000 judíos habían abandonado Alemania gracias al trabajo de estos.
Los nazis habían hecho creer a gran parte del pueblo germano que los judíos, inofensivos y vulnerables, eran repugnantes y letales. Himmler (líder nazi, creador del servicio de seguridad) consideraba malo el amor fraternal y la piedad, y por lo tanto era necesario dureza y autodisciplina. “A los alemanes que se negaban a romper sus vínculos con judíos se les tachaba de tontos y lacayos. Hiemer (radical) […], mostraba su horror por el hecho de que ‹‹hay hombres y mujeres que de pronto han sido poseídos por una incomprensible piedad por el criminal pueblo judío››”[4].
El uso de propaganda y la educación masiva son también importantes para entender el considerable avance de Hitler en su proyecto del “mejoramiento de la raza”. En 1933 se creó el Ministerio de Ilustración y Propaganda de la Gente a cargo del líder nazi Goebbels. Los medios utilizados para informar a los alemanes de la ideología nazi eran la radio, las películas y la influencia cultural (literatura, música y otras artes). Además era importante educar a la población alemana. Los niños desde la escuela recibieron una educación basada en la ideología nazi, por ejemplo leían cuentos en los que los villanos eran los judíos o los libros de matemáticas resolvían problemas del costo para producir asilos para locos. La educación era un proceso de largo plazo para formar a los nuevos nazis. En las escuelas se radicalizó el programa, se le dio importancia a materias como eugenesia, introducción al estudio de la raza y ciencias de la salud. Para Goebbels no sólo era necesaria la aceptación por parte de los alemanes del régimen, sino su lealtad.
Otra razón que permitió las barbaridades de Hitler y los nazis fue la poca resistencia y también la coincidencia que existía por parte de los otros estados europeos. Según el historiar Eric Hobsbawm, los gobiernos Francia y Reino Unido con el fin de evitar otro conflicto como el de 1914, permitieron a Hitler imponer su voluntad. Como en el caso que Alemania exigió la anexión de los Sudetes al Reich en donde se encontraban algunos alemanes que no vivían como la “raza aria” sino bajo la opresión de los checos. “¡Paz o guerra! O acepta esta oferta y les concede libertad a los alemanes, o iremos nosotros mismos a buscar esa libertad”[5], días más tarde de esta amenaza de Hitler, fueron firmados los tratados de Munich en los que se le concedió al tercer Reich una parte de Checoslovaquia.
En cuanto a la coincidencia de algunas ideas nazis por parte de la gente extranjera fue importante para que los otros estados europeos no intervinieran, al menos hasta que Alemania fue una verdadera amenaza. El antisemitismo no sólo se había expresado en Alemania: a finales del siglo XIX éste se desarrollo como un importante factor político en Alemania, Austria y Francia. En Francia en 1894, Alfred Dreyfus, un oficial judío, fue acusado y condenado por espionaje a favor de Alemania, al intentar defenderlo, el coronel Picquart, fue detenido, acusado y condenado.
Como conclusión, durante el régimen nazi se impulso la concepción de la formación de una “raza perfecta”, la “raza superior”. Era necesario aumentar la población de la “raza apta” y mejorar su calidad de vida y reducir la población de las “razas no aptas”. Todo esto se pudo llevar a cabo debido a ciertos factores: (1) el apoyo de algunos alemanes y por el temor de otros a su líder Adolf Hitler y a los nazis. (2) El uso de la propaganda y la educación para expandir las ideologías nazis. Y (3) porque las demás naciones europeas no querían conflictos con Alemania y en algunos casos existían coincidencias con la ideología de los nazis. Durante la época hitleriana, muchos alemanes en realidad no veían mal los crímenes que se hacían, creían en la ideología nazi. Sólo hasta después de la guerra, del genocidio humano, fue cuando terminó o disminuyó de manera considerable los abusos contra judíos, gitanos, enfermos, etcétera, y la idea de la purificación de la raza.
Bibliografía:
Arendt, Hannah. Los orígenes del totalitarismo. 1. Antisemitismo. España: Alianza Editorial, 1987.
Hitler, Adolf. Se me ha acabado la paciencia. Copias.
Hobsbawm, Eric. Historia del Siglo XX. Barcelona: Crítica, 2005.
Hobsbawm, Eric. La era del Imperio. Barcelona: Crítica, 2003.
Koonz, Claudia. La conciencia Nazi. España: Paidos, 2005.
Lee, Stephen J. Hitler and Nazi Germany. Londres; Nueva York: Routledge, 1998.
Nietzche, Friedrich. Así habló Zaratustra. Colombia: Grupo Editorial Tomo, 2003.
Steinert, Marlis. Hitler y el universo hitleriano. Barcelona: Vergara, 2004.
Recursos audiovisuales:
Documental de la BBC – Auschwitz: los nazis y “la solución final”.
[1] Según el historiador Eric Hobsbawm en su libro “La era del Imperio”, la eugenesia es un Programa para aplicar al género humano las técnicas de reproducción selectiva familiares en la agricultura y la ganadería.
[2] Tanto la teoría del origen especies de Charles Darwin como el término de “superhombre” de Friedrich Nietzsche fueron malinterpretado por los imperialistas. La teoría de Darwin se refería a la evolución y adaptación de las especies más fuertes y no a la obligación de una “raza superior” a dominar a las demás razas. En cuanto al término de “superhombre”, Nietzsche se refería a un hombre con una forma de pensar diferente al hombre común y no a un conjunto de personas pertenecientes a una raza superior.
[3] Marlis Steinert, “Racismo y exterminio” en Hitler y el universo hitleriano. (Barcelona: Vergara, 2004), 449.
[4] Claudia Koonz. “Guerreros de la raza” en La conciencia Nazi. (España: Paidos, 2005), p. 284.
[5] Adolf Hitler. Se me ha acabado la paciencia. Copias
